Los locales pretendían ganar en el campo lo que en la temporada anterior se les arrebató en los despachos
Después de las desavenencias de la temporada pasada motivadas por la denuncia del club cullerense al Alzira por una alineación indebida, volvía al Polideportivo «Jorge Martínez Aspar» el derby con más morbo de los últimos años.
Los encuentros de la campaña anterior, resultaron muy trabados, con poco juego y resultados cortos, pero, en esta ocasión los alzireños buscaban la «revancha» deportiva y pretendían ganar en el campo lo que la temporada anterior se les arrebató en los despachos.
Con más ambiente en las gradas que en otras ocasiones, se enfrentaron Alzira y Cullera en el derby comarcal, en otras ocasiones muy igualado en esta cita los locales han demostrado sobre el césped su superioridad.
Desde el principio el Alzira se lanzaron a por el encuentro, tal vez con demasiadas imprecisiones producto de las ansias por abrir pronto el marcador, hasta que se adelantaron con un golpe de castigo pero, el Cullera lograba remontar con dos golpes de castigo (3-6), y es que el arbitraje del Sr. Real, fue en exceso meticuloso, pitando en demasía y sin dejar jugar; sin duda no quería que el «derby» se le fuera de las manos.
En los últimos quince minutos de la primera parte el Alzira puso una marcha más y consiguió tres ensayos que les adelantaba claramente en el marcador.
En una segunda mitad falta de ritmo por las constantes interrupciones en el juego, los locales terminaron de imponerse definitivamente.
Anotaron por el Alzira, David Ferrer, José Vicent, Kike Boils, Nacho Bertomeu, Dani Vento, Rhys Morgan y Pablo Medina, las transformaciones corrieron a cargo de Morgan y Medina y los golpes de castigo los convirtió Morgan.
Aunque el arbitro interrumpió el juego constantemente, cabe destacar la corrección de ambos equipos pese a la rivalidad.